Tomás Caíno: el cuerpo en huelga, el alma en pie de lucha

El sindicalista que se expone bien.

El paranaense Tomás Caíno, en su pie de lucha.

Por Franco Lizarzuay, especial para Minuto Entre Ríos

Varios lo visualizan.

En una carpa modesta frente a la Casa de Gobierno en Paraná, un hombre mayor de 70 años delgado, con mirada serena pero firme, lleva sobre sus hombros más que una protesta: carga una historia de lucha, compromiso y defensa de lo colectivo.

Su nombre es Tomás Caíno, jubilado docente, dirigente sindical de la agrupación Multicolor Entre Ríos, y ahora, protagonista de una huelga de hambre en defensa del IOSPER, la obra social de los empleados públicos entrerrianos.

Pero Tomás no está solo. Con él están los recuerdos de décadas de militancia, las voces de miles de trabajadores y jubilados que se sienten invisibles, y la certeza de que, incluso en el retiro, la dignidad no se negocia.

El legado de una vida dedicada a los demás

Durante más de 40 años, Tomás Caíno enseñó en las aulas públicas, transitando escuelas rurales, urbanas y periféricas. Allí donde el Estado muchas veces flaquea, él estuvo.

Pero su entrega no terminó en el aula: fue delegado, referente sindical y voz activa en cada lucha donde un derecho se ponía en juego. Siempre al frente, sin estridencias, pero con convicción.

En asambleas, paros, y marchas, su palabra se hizo cuerpo, y su cuerpo se hizo causa.