A diferencia de la mecánica aplicada en la Cámara de Diputados, en el Senado se está citando a las personas señaladas y se les ofrece la posibilidad de renunciar antes de la exoneración.

Entre los señalados se encuentran ex funcionarios de Gustavo Bordet, un conocido conductor radial y operador mediático del peronismo, así como un miembro del Tribunal de Cuentas.

Los receptores de los mensajes han sido citados a reuniones, ya sea con el responsable del área o con la secretaria coordinadora del Senado. En estas reuniones se les informa que no cuentan con estabilidad laboral y se les ofrecen dos opciones: renunciar o ser dados de baja.

Por el momento, no se ha dado a conocer cuáles son las decisiones mayoritarias. Algunos podrían optar por renunciar para reducir su exposición pública, mientras que otros podrían presentar recursos administrativos o judiciales.

Simultáneamente, se están revirtiendo las recategorizaciones otorgadas en el último tramo del gobierno anterior, muchas de las cuales fueron otorgadas a personas sin estabilidad laboral y con menos de un año de antigüedad.

Se observaron casos de personas recategorizadas en ausencia, que fueron designadas en planta permanente y obtuvieron mejoras en sus categorías de revista sin haber pisado la Legislatura.

Muchas de las personas cuyas designaciones se están dando de baja se amparan mediante las denominadas “afectaciones”, lo que permite que un empleado de un área vaya a trabajar a otra dentro de la cámara sin registrar asistencia en reloj.